El coordinador de Acció Cultural del País Valencià (ACPV), Toni Gisbert, denunció ayer que la Generalitat valenciana presidida por Francisco Camps "está obsesionada con el control de la televisión pública, sobre todo en el asunto lingüístico". Para hacerle frente, su organización presentó en el Congreso 651.000 firmas "para legalizar el intercambio de las televisiones y radios en lengua catalana, gallega y vasca", entre diferentes comunidades autónomas.
Gisbert explicó que su propuesta pretende que España cumpla con la Carta Europea de las Lenguas Regionales o Minoritarias, suscrita por el Gobierno en 1992. El objetivo de ACPV es, además, "impulsar el desarrollo de la España plural".
En el caso de que la iniciativa salga adelante, las televisiones autonómicas de Catalunya, Comunitat Valenciana o Illes Balears todas ellas en lengua catalana podrán verse en las tres comunidades. Lo mismo ocurriría con la ETB de Euskadi, que se podría sintonizar también en Navarra. La organización ya se ha puesto en contacto con los principales grupos políticos encargados de impulsar la tramitación de la iniciativa en el Congreso.